El producto interno bruto es una variable que sirve para el estudio de la economía, principalmente en la producción final que se da en un período de tiempo. Esta variable se puede representar por las siglas PIB. Actualmente es el indicador económico más utilizado en todo el mundo. Para poder utilizarlo requerimos de las matemáticas, consiste en sumas, y que por ser un concepto meramente económico, se expresa en términos monetarios. Para esta suma se toman en cuenta la totalidad de los bienes y de los servicios que se producen por las empresas (privadas y públicas).
En cuanto a la agricultura, servicios e industria, se toman solamente los bienes finales debido a que la materia prima, como es obvio pensar, es cobrada en el cobro del producto final. Un buen ejemplo, el pan es cobrado a un cierto valor, pero no se cobra sólo por la harina, sino que este valor ya va incluido junto con la elaboración y otros ingredientes. Viéndolo de esta manera, tenemos que el valor final de todo esto sería la suma de todos los factores que se van añadiendo y a lo largo de un proceso, o bien, podría tratarse de un servicio.
Una representación correcta sería así:
Producción = Valor Añadido = Oferta Agregada. Donde la producción es la suma antes mencionada multiplicada por el valor del producto. Para los Criterios de medición, hay varios criterios para clasificar el PIB, tenemos los siguientes:
- Según su carácter nacional: es interior y nacional.
- Según la valoración de los bienes y servicios: precios de mercado y costo de los factores.
- Según la consideración de la depreciación del capital: Producto bruto y producto neto.
De todos los mencionados anteriormente, el criterio más utilizado suele ser el primero.